Grupo CES "Creando mi suerte"

En una conversación donde intervenían varias personas el tema era si la suerte buena o mala existía, por una parte se preguntaban ¿por qué a algunas personas la suerte siempre les sonreía? y por el otro lado afirmaban que no es cuestión de suerte sino de acciones. Y bien aquí no trataremos de demostrar ninguno de esos puntos; sin embargo, si deseamos compartir que esa satisfacción de lograr trabajar en donde somos nosotros mismos, donde la única aprobación que se necesita es la complacencia de quienes servimos, donde los sentimientos positivos prevalecen en cada toma de decisión, donde la claridad nos la provee la FE en Cristo…… no llega de manera misteriosa, sino por nuestro impulso por concretar nuestros sueños.

Desear suerte a alguien es desearle que tenga la lucidez de percibir cada pista que el universo tiene en su camino, esos signos que ciertas personas llaman “suerte”. El universo no conspira contra ti ni nadie en el mundo dirige “malas vibras contra ti” solo estas ocupado esperando que tu existencia sea resuelta por “fuerzas especiales que te brinden lo deseado de manera fácil”.

Cualquiera que sea tu posición sobre “la suerte” lo que debes siempre honrar son tus pensamientos positivos, recuerda que tus aspiraciones solo necesitan de tus energías ejecutando las acciones indispensables para verlas concretadas.